¿Por qué niños y adolescentes no deben hacer sus deberes con la IA? psicólogo Majadahonda

Psicólogo Majadahonda explica por qué niños y adolescentes no deben hacer sus deberes con la IA

¿Te has sorprendido alguna vez al ver a tu hijo pidiendo a un chat de inteligencia artificial que resuelva sus ejercicios de matemáticas o redacte un comentario de texto? En la era de la inmediatez, las pantallas ofrecen respuestas rápidas, pero ¿a qué precio? Cuando los estudiantes sustituyen su esfuerzo por el de la máquina, no solo ponen en juego sus calificaciones: comprometen su desarrollo cognitivo, su autoestima y la calidad del vínculo con sus padres y docentes.

Como centro psicológico en Majadahonda, en Self Psicólogos vemos cada vez más familias preocupadas por este fenómeno. Acompáñame a explorar por qué es clave que los niños y adolescentes hagan sus tareas por sí mismos y cómo puedes guiarlos hacia un uso sano de la IA.

1. La magia del aprendizaje activo: mucho más que respuestas instantáneas

El aprendizaje no consiste únicamente en obtener la solución correcta; implica procesar la información, equivocarse y volver a intentarlo. Esa ruta, llena de pequeños “¿por qué?” y “¿cómo?”, construye las conexiones neuronales que sostienen la función ejecutiva, la memoria de trabajo y el pensamiento crítico. Un metaanálisis reciente señala que la dependencia excesiva de sistemas conversacionales con IA reduce la capacidad de juicio crítico y de análisis de los estudiantes SpringerOpen.

Cuando el dispositivo “piensa” por ellos, los chavales:

• Practican menos la planificación y la organización mental.

• Relegan la reflexión profunda y se quedan en la superficie de los contenidos.

• Pierden la oportunidad de descubrir su propio estilo de resolución de problemas.

En consecuencia, el aprendizaje se vuelve frágil, fácil de olvidar y carente de sentido personal.

2. Riesgos psicológicos de dejar que la máquina piense

Más allá de lo puramente académico, delegar los deberes a la IA puede afectar el bienestar emocional y la salud mental:

1. Autoestima condicionada: si la nota alta es “mérito” del algoritmo, el estudiante no integra el logro como propio. Con el tiempo, esto debilita su confianza para afrontar retos mayores.

2. Ansiedad académica: depender de una herramienta externa genera la sensación de que “sin IA no valgo”; un círculo que aumenta la presión interna ante exámenes o trabajos presenciales.

3. Plagio y ética: copiar sin citar vulnera la integridad académica y puede acarrear sanciones escolares. Un estudio reciente advierte del incremento de plagio y de la pérdida de habilidades de resolución de problemas cuando el uso de IA no se regula adecuadamente PubMed.

Como padres o docentes, es importante detectar si el adolescente muestra desinterés repentino, respuestas excesivamente “perfectas” o un discurso poco coherente con su nivel habitual.

3. El efecto dominó en la dinámica familiar y escolar

• Relaciones familiares: las discusiones sobre “hacer trampas” pueden erosionar la confianza mutua. Un clima de sospecha hace que la conversación se enfoque en el control y no en el acompañamiento.

• Vínculo con los profesores: la IA interfiere en la comunicación honesta sobre las dificultades reales del alumno, lo que impide al docente ajustar su apoyo.

• Sentido de pertenencia: el aula es un espacio relacional; cuando un estudiante se siente “fuera de juego” porque no domina los contenidos que “presentó” la IA, tiende a aislarse.

Las relaciones de calidad —con la familia, los iguales y el profesorado— son la base de una salud mental robusta. Cuidarlas implica promover la autenticidad en el aprendizaje.

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Pautas y estrategias para el bienestar relacional en la era de la IA

1. Establece acuerdos claros. Conversa sobre cuándo es útil consultar la IA (por ejemplo, para aclarar conceptos) y cuándo debe prevalecer el esfuerzo propio.

2. Fomenta la metacognición. Anima a tu hijo a preguntarse: “¿Qué sé ya?”, “¿Dónde me atascó?” antes de recurrir a la tecnología.

3. Modela la curiosidad. Investiga juntos: “Vamos a comparar lo que propone la IA con la explicación del libro”. Así conviertes la herramienta en un objeto de análisis crítico.

4. Refuerza el proceso, no solo el resultado. Celebra los intentos, los borradores y las mejoras. Esto fortalece la motivación interna.

5. Cuida la rutina familiar. Establece horarios de estudio sin dispositivos externos y momentos de ocio offline que refuercen el vínculo.

6. Pregunta directamente:

   • ¿Te has sentido tentado a copiar la respuesta tal cual?

   • ¿Qué parte del ejercicio entiendes mejor después de intentarlo tú primero?

   • ¿Cómo crees que tus profesores podrían ayudarte si supieran en qué punto te atascas?

Si al leer estas preguntas notas que tu hijo o hija se reconoce en ellas, quizá sea momento de buscar ayuda psicológica especializada en psicología infantil o psicología adolescente.

Conclusión

La IA puede ser una excelente aliada cuando se usa para enriquecer, no para sustituir, la experiencia de aprender. Garantizar que niños y adolescentes hagan sus deberes por sí mismos fortalece sus capacidades cognitivas, su sensación de competencia y sus vínculos con quienes les rodean.

Escrito por Rebeca Carrasco García psicóloga en Majadahonda

En Self Psicólogos —tu clínica de psicología en Majadahonda— acompañamos a familias de Pozuelo de Alarcón, Boadilla del Monte y Las Rozas que buscan fomentar la autonomía académica y el bienestar emocional de sus hijos. Ofrecemos terapia familiar, psicología infantil, psicología adolescente y orientación para colegios y empresas. Puedes encontrarnos en la Calle Gran Vía 52 para psicoterapia Majadahonda o sesiones online. Si sientes que este tema resuena en tu hogar, estaremos encantados de ayudarte a construir un aprendizaje auténtico y relaciones más sólidas.