Cómo reconocer la depresión posparto

La llegada de un bebé suele ser un momento de felicidad y alegría. Sin embargo, para algunas personas, esta etapa puede resultar abrumadora y desafiante. La depresión posparto o DPP es una condición común que afecta hasta al 15% de las mujeres después del parto. Pero también puede afectar a cualquier persona que acoja un bebé en su vida, ya sea: madre biológica, adoptiva, gestante de alquiler, padre biológico o no biológico, así como a parejas del mismo sexo. En este artículo, exploraremos qué es la depresión posparto, sus síntomas y cómo abordar esta condición de manera efectiva.

Tipos de depresión posparto:

La depresión posparto se manifiesta en tres tipos principales:

• Melancolía posparto o «baby blues»: afecta al 50-75% de las personas después del parto, con síntomas como llanto frecuente, tristeza y ansiedad.
• Depresión posparto: afecta aproximadamente a 1 de cada 7 nuevos padres, con síntomas que incluyen cambios de humor, fatiga, irritabilidad y sentimientos de culpa.
• Psicosis posparto: la forma más severa, afectando a 1 de cada 1,000 personas, con síntomas graves como agitación, insomnio y alucinaciones.

¿Cómo se si tengo depresión postparto?

1. ¿Te sientes triste, abrumada/o o sin esperanza la mayor parte del tiempo desde la llegada de tu bebé?
2. ¿Experimentas cambios de humor significativos, como pasar de sentirte bien a sentirte extremadamente triste o irritada/o?
3. ¿Sientes una pérdida de interés en actividades que antes disfrutabas, como hobbies o pasar tiempo con amigos y familiares?
4. ¿Tienes problemas para dormir, incluso cuando tienes la oportunidad de descansar mientras tu bebé duerme?
5. ¿Experimentas una falta de energía o motivación para realizar tareas cotidianas, como cuidar de ti misma/o o de tu bebé?
6. ¿Sientes culpa, ansiedad o preocupación excesiva sobre tu capacidad para ser una buena/o madre/padre?
7. ¿Has tenido pensamientos negativos sobre ti misma, tu bebé o tu situación que te han preocupado?
8. ¿Te resulta difícil concentrarte o tomar decisiones simples en tu vida diaria?
9. ¿Sientes que no puedes manejar tu situación o que todo es abrumador?
10. ¿Has tenido pensamientos de hacerle daño a ti misma/o o a tu bebé?

Recuerda que esta autoevaluación no sustituye la opinión de un profesional de la salud mental. Si respondes afirmativamente a varias de estas preguntas, es importante buscar ayuda y apoyo de un médico o terapeuta especializado en salud mental.

¿Qué hago si tengo depresión posparto?

Es esencial abordar esta condición para proteger la salud tanto de la madre como del bebé. Podemos encontrar diferentes tratamientos:

• Psicoterapia: en estos casos a veces es necesario contar con la ayuda de un profesional de la salud mental. Aportará un enfoque efectivo para poder abordar la DPP.
• Medicación: en determinados casos cuando los síntomas son más severos o persistentes en el tiempo se puede recurrir al uso de antidepresivos y psicofármacos. Pero es importante poder hablarlo con un médico para poder discutir los riesgos y beneficios del uso de psicofármacos, especialmente durante el embarazo o la lactancia.  En algunas ocasiones es necesario la combinación de psicoterapia junto con medicación.
• Grupos de apoyo: existen recursos como grupos de apoyo para personas que están pasando por una situación similar. Se trata de una red de ayuda adicional donde poder encontrar recursos útiles para personas que enfrentan esta condición.
• Familia y amigos: tener una red de apoyo es fundamental para sentirse comprendida y arropada en este proceso. La familia y los amigos juegan un papel crucial en el apoyo emocional y práctico durante este período.